Mis Flores

¿Dónde se fueron mis flores cuando cansadas de luchar se secaron por los rincones.? Un día estaban conmigo y al día siguiente por mucho que las llamase no atendían a razones.

La primera, la más dulce, se me marchó cuando niña, ella me cantaba en las noches y me contaba…

“ Margarita está linda la mar y el viento, lleva esencia sutil de azahar; yo siento en el alma una alondra cantar; tu acento: Margarita, te voy a contar”. Se fue sin decirme nada, sin poder acariciar su cara, sin poder pararme a mirarla cuando ya se había marchado y solo su tallo quedaba.

Una frágil a mi lado desde siempre, que en sus silencios me hacía reír con las palabras que no decía, crecimos juntos y pasamos la juventud casi siempre de la mano, mi amigo, mi hermano sin que la sangre nos rozara. Su mirada sincera, con unos ojos que una mañana cuando el sol ni siquiera aparecía me dijeron adiós entre el respirar entrecortado del momento que venía.

Mi flor, la que me dio la vida, la que cuidó mis desvelos y los males de mi vida. Mi flor, la mas bonita, la que me dio el nombre, el suyo mismo, la que me dijo Margarita. Mi flor como un roble por fuera y delicada en sus adentros. Mi flor que se fue marchitando sin que me diese cuenta pues su sonrisa ocultaba la pena que ella sentía. Avisando mi flor cansada, suplicando me pedía que la dejase marchar y yo solo le decía, solo un poco mas, que tu olor me da la paz que preciso de mis días.

Cuando tu flor se marcha arranca de raíz lo que tu vida ha sido. Vacío absoluto en tu cuerpo que busca la voz que te calma entre llantos y lamentos, una voz que se desvanece y que poco a poco olvidas y te esfuerzas por tener presente por poder volver a oírla, mas un día te levantas y ya no puedes recordarla, solo te quedaba su voz y se la ha llevado mientras dormías.

No hay un día en que no huela el perfume de mis flores perdidas y que entre sueños les hable medio dormida. No hay día que busque por mi casa en las esquinas y que escuche los susurros que hacia a ellas me encaminan.

En mi jardín hay nuevas flores que me agarran a la vida mas las flores que se fueron me dejaron un legado que me marcará de por vida.